La asociación de cultivos es una forma sencilla y eficaz de optimizar los resultados en tu huerto o invernadero. Esta técnica consiste en juntar plantas con diferentes necesidades para que se complementen, logrando minimizar la competencia por los recursos naturales y disminuyendo la propagación de plagas; entre otras ventajas.
Sacarle el máximo partido a esta técnica es fundamental para obtener el máximo rendimiento en tus cultivos. Si además, combinas sus beneficios con los que te brindan los invernaderos (incluyendo aquellos para uso particular como el invernadero túnel huerto de Sistemas Hortícolas Almería) podrás obtener unas hortalizas sanas, grandes y deliciosas.
En Sistemas Hortícolas Almería somos especialistas en materiales y herramientas para el montaje y mantenimiento de tu invernadero. Te ayudamos a obtener los mejores resultados en tus cultivos ofreciéndote productos de la más alta calidad y compartiendo todo tipo de consejos útiles. En esta ocasión, te contamos cómo aplicar la asociación de cultivos para maximizar tus resultados. ¡Sigue leyendo y toma nota de todas las claves!
¿Qué es la asociación de cultivos?
La asociación de cultivos consiste en distribuir el espacio de cultivo de forma estratégica, juntando plantas con diferentes necesidades que puedan complementarse y de esta forma conseguir ciertos beneficios que no se tendrían cultivándolas por separado.
Un ejemplo básico y común de asociación de cultivos sería plantar zanahorias cerca de las cebollas, ya que las segundas son un repelente natural de la mosca de la zanahoria. De este modo, se previene la aparición de una plaga que podría provocar grandes daños en nuestras zanahorias.
Combatir posibles plagas de una forma natural y ecológica no es la única aplicación de la asociación de cultivos; esta también puede utilizarse para mejorar el crecimiento o para potenciar el sabor de algunas hortalizas.
Consejos para hacer una buena asociación de cultivos
Para beneficiarnos de una buena asociación de cultivos tenemos que emparejar plantas que se complementen entre sí. Estos son algunos consejos para crear una asociación de cultivos beneficiosa:
- Es recomendable combinar cultivos con diferentes velocidades de crecimiento para optimizar al máximo el espacio disponible y para que no haya competencia entre las plantas.
- Los cultivos de la misma familia normalmente suelen ser incompatibles.
- Las frutas y hortalizas suelen beneficiarse de una asociación con plantas florales y aromáticas porque estas pueden repeler las plagas de forma natural.
- Las leguminosas pueden combinarse con cultivos más exigentes para evitar el agotamiento del terreno ya que estas aportan nitrógeno y otros nutrientes al suelo.
Principales compatibilidades entre cultivos
Aunque existen otras muchas asociaciones de cultivos beneficiosas, a continuación tienes un listado con las mejores compatibilidades para los cultivos más comunes en huertos e invernaderos:
- Acelgas: Acelga, apio, cebollas, col, judía, lechugas, pimiento, rábano, tomate y zanahoria.
- Ajos: Albahaca, berenjena, escarola, fresas, lechuga, nabo, pepino, pimiento, remolacha, tomate y zanahoria.
- Albahaca: Judía, pepino, pimiento y tomate.
- Alcachofas: Judía, lechuga, guisante y rábano.
- Apios: Acelga, berenjena, col espinaca, judía, pepino, puerro, rábano y pimiento.
- Berenjenas: Ajo, apio, cebolla, col, escarola, espinaca, judía, lechuga, patata, puerro y rábano.
- Calabacines: Albahaca, cebolla, guisante, judía, lechuga, patata y maíz.
- Calabazas: Albahaca, cebolla, col, guisante, judía, lechuga y maíz.
- Cebollas: Berenjena, calabacín, col, escarola, espinaca, fresa, lechuga, melón, pepino, perejil, puerro, remolacha, sandía, tomate y zanahoria.
- Coles: Acelga, apio, berenjena, calabaza, cebolla, escarola, espinaca, guisante, judía, lechuga, nabo, patata, pepino, pimiento, puerro, remolacha y tomate, zanahoria.
- Coliflores: Apio y tomate.
- Escarolas: Ajo, berenjena, cebolla, col, espinaca, fresas, nabo y puerro.
- Espárragos: Guisante, lechuga, pepino, perejil, puerro, rábano.
- Espinacas: Apio, berenjena, borraja, cebolla, col, escarola, fresa, guisante, haba, judía, lechuga, nabo, pimiento, puerro, rábano, tomate y zanahoria.
- Fresas: Ajo, cebolla, espinaca, lechuga, puerro y tomillo.
- Guisantes: Apio, calabacín, col, espárragos, espinaca, lechuga, maíz, melón, nabo, patata, pepino, pimiento, rábano, sandía, tomate y zanahoria.
- Habas: Alcachofa, apio, espinaca, lechuga, maíz, patata y romero.
- Judías: Albahaca, acelga, apio, berenjena, calabacín, calabaza, col, espinaca, fresa, lechuga, maíz, nabo, patata, pepino, pimiento, rábano, repollo y tomate, zanahoria.
- Lechugas: Ajo, berenjena, calabacín, calabaza, cebolla, col, espinaca, fresa, guisante, haba, judía, maíz, melón, nabo, patata, pepino, pimiento, puerro, rábano, remolacha, sandía, tomate y zanahoria.
- Maíz: Calabaza, guisante, haba, judía, melón, patata, pepino, sandía y tomate.
- Melones: Cebolla, guisante, lechuga y maíz.
- Nabos: Col, espinaca, guisante, judía, lechuga, pepino, puerro, remolacha y tomate.
- Patatas: Berenjena, calabacín, col, haba, judía, maíz, puerro, rábano y zanahoria.
- Pepinos: Ajo, albahaca, apio, borraja, cebolla, col, espárrago, guisante, judía, lechuga, maíz, nabo, rábano, y remolacha.
- Pimientos: Acelga, ajo, albahaca, col, espinaca, guisante, judía, lechuga, puerro y rábano.
- Puerros: Apio, berenjena, cebolla, col, escarola, espinaca, lechuga, patata, pimiento, remolacha, tomate y zanahoria
- Rábanos: Acelga, ajo, apio, berenjena, espinaca, guisante, judía, lechuga, patata, pepino, pimiento, tomate y zanahoria.
- Remolachas: Apio, ajo, cebolla, col, lechuga, nabo, pepino y puerro.
- Repollos: Apio, guisante, judía, lechuga, patata, pepino, puerro, remolacha y tomate.
- Sandías: Cebolla, guisante, lechuga y maíz.
- Tomates: Acelga, ajo, albahaca, apio, cebolla, col, espárrago, espinaca, guisante, judía, lechuga, maíz, perejil, puerro, rábano y zanahoria.
- Zanahorias: Acelga, ajo, berenjena, cebolla, col, guisante, judía, lechuga, patata, puerro, rábano, tomate.