Los agricultores muchas veces hablan de lo fundamental que es dejar el terreno en barbecho para obtener mejores resultados en temporadas posteriores pero… ¿Qué es el barbecho realmente y por qué es tan importante?
La forma más sencilla de explicar qué es el barbecho es señalar que es una técnica agrícola que consiste en dejar descansar el terreno durante un tiempo determinado para que este pueda recuperarse. Se evita sembrar durante uno o varios años para que el suelo no se agote y también, para que se encuentre en condiciones óptimas de cultivo para campañas posteriores.
Aunque a priori el barbecho pueda parecer una técnica contraproducente, a la larga compensa a los agricultores. Es importante entender que los recursos del suelo no son ilimitados y que, aunque la lógica pueda señalar a simple vista que sembrar más siempre va a ser mejor, a largo plazo puede convertirse en un problema. El barbecho es fundamental para evitar el agotamiento del terreno y también para prepararlo para que este sea más productivo en el futuro. En definitiva, es una técnica con grandes beneficios a largo plazo.
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En este artículo te contamos qué es el barbecho, cuáles son sus diferentes tipos y para qué sirve.
¿Qué significa dejar un terreno en barbecho?
El barbecho es una técnica que se emplea en agricultura que consiste en dejar una tierra de cultivo sin sembrar durante uno o varios ciclos vegetativos. El objetivo es conseguir que esta se recupere, acumule humedad y materia orgánica, para obtener mejores resultados cuando vuelva a cultivarse.
Como curiosidad, la palabra barbecho viene del término en latín “vervactum” formado por la unión de “ver, veris” (primavera) y “actum” ( hecho). Es decir, esta palabra que proviene del latín se puede traducir literalmente como “hecho para la primavera”.
Tipos de barbecho
Básicamente, existe dos tipos de barbecho que se distinguen en función del periodo de reposo entre cultivos:
- Barbecho corto: Cuando solo pasan uno o dos años hasta que la tierra es cultivada de nuevo. En estos casos, lo habitual es que la regeneración del terreno no sea completa.
- Barbecho largo: Son periodos de descanso más largos, habitualmente de tres a cuatro años, para lograr una regeneración completa del terreno.
Además de esta clasificación, los agricultores utilizan otros dos términos:
- Barbecho de año y vez: Consiste en dejar descansar el terreno una vez al año.
- Barbecho al tercio: Consiste en aplicar dos años de descanso por cada año de cultivo.
También podemos diferenciar los tipos de barbecho según la forma en la que se aplica:
- Barbecho herbáceo o rastrojera: Es cuando la tierra se abandona por completo durante el periodo de descanso.
- Barbecho labrado: El terreno sí que se mantiene durante el periodo de descanso. En estos casos, podemos diferenciar a la vez entre dos opciones:
- Barbecho de labrado químico: Cuando se utilizan plaguicidas para acabar con las malas hierbas.
- Barbecho de labrado mecánico: El terreno se trata con herramientas para acelerar los procesos de descomposición al enterrar las hierbas.
Por último, también podemos hacer una clasificación de los tipos de barbecho en función de si plantamos o no algo para recuperar el terreno. En este caso tenemos:
- Barbecho de semillado: Consiste en sembrar con el objetivo de nutrir el suelo. Lo habitual es utilizar especies leguminosas como los garbanzos o las lentejas.
- Barbecho blanco: El más habitual, es cuando no se planta nada.
¿Para qué sirve dejar un terreno en barbecho?
El barbecho es un técnica que se asocia a la rotación de cultivos y a la agricultura sostenible ya que su principio básico es evitar el “agotamiento” del suelo. Al darle un tiempo de reposo, el suelo puede recuperarse y equilibrarse.
El objetivo fundamental del barbecho es evitar la sobreexplotación del terreno y el deterioro del producto (las hortalizas) obtenido. Esta técnica también busca que la tierra se encuentre con las condiciones óptimas para producir una cosecha de calidad.
Esta técnica también se utiliza para combatir a los patógenos que puedan amenazar a los futuros cultivos. Al no encontrar nuevos huéspedes (plantas), no pueden renovarse.