¿Te preguntas qué plantar en marzo? Para obtener los mejores resultados con tus cultivos, seguir el calendario de siembra es fundamental y, por eso, desde Sistemas Hortícolas Almería te damos todas las claves para que sepas exactamente qué es mejor plantar en el mes de marzo.
Si te interesa conocer el calendario de siembra para otros meses, no te pierdas nuestro artículo sobre qué sembrar en enero.
En este artículo te contamos qué labores puedes hacer durante el mes de marzo en tu invernadero y te damos todas las claves sobre qué puedes plantar en marzo. ¡Toma nota!
Labores que hacer en marzo en tu invernadero
Marzo es el mes en el que empieza la primavera y durante las primeras semanas todavía hace frío y humedad. Por eso, es recomendable esperar a que el tiempo mejore para empezar a plantar las hortalizas que te proponemos.
En las primeras semanas de marzo puedes empezar a trabajar en tu espacio de siembra, abonando la tierra y preparando semilleros de berenjenas, calabazas, cebollas, coles de bruselas y de repollo, melones, pepinos, pimientos, tomates, albahaca, anís, hierbabuena y orégano.
¿Qué se puede plantar en marzo?
A continuación te contamos cuáles son todas las hortalizas y plantas aromáticas que es recomendable sembrar durante el mes de marzo.
Acelgas
Lo bueno de las acelgas es que se pueden cultivar durante todas las estaciones del año. Para que la planta se desarrolle correctamente necesita un suelo fresco, profundo y fértil y un riego frecuente, pero sin llegar a encharcar.
Las acelgas pueden recolectarse pasados entre 50 y 60 días. Pueden recogerse las hojas sueltas o la planta entera.
Alcachofas
Las alcachofas pueden plantarse tanto en invierno como en primavera. Estas hortalizas tan apreciadas por su sabor intenso y suave necesitan un suelo profundo y rico en materia orgánica.
Respecto al riego, las alcachofas necesitan que sea espaciado pero abundante.
Pueden recolectarse unas cuatro o cinco cosechas y es recomendable recoger la primera cinco meses después de la siembra, antes de que las alcachofas se abran.
Apio
El apio puede plantarse tanto en primavera como en verano y precisa un suelo rico, fresco y blando pues requiere una humedad constante.
Tras la siembra, podrás recolectar tus apios después de unos cuatro o cinco meses.
Berenjenas
Las berenjenas pueden plantarse en cuanto llegue el buen tiempo. Lo más habitual es sembrarlas en verano pero en función de la zona también podrás hacerlo durante la primavera.
El suelo ideal para el cultivo tiene que estar suelto pero bien abonado y debe ser capaz de retener bien la humedad.
Podrás recolectar tus berenjenas a los tres meses. Cada planta suele producir entre 10 y 30 hortalizas.
Cebollas
Las cebollas también pueden cultivarse durante todo el año y necesitan un suelo ligero, aireado y con poca materia orgánica.
El riego tiene que ser regular en los primeros momentos tras la siembra e ir espaciando poco a poco.
Podrás recolectar las cebollas en unos tres o cuatro meses después de la siembra.
Coliflor
Puedes cultivar la coliflor durante todo el año. Esta necesita un suelo arcilloso, aireado y rico en materia orgánica y un riego espaciado pero abundante.
La coliflor puede recolectarse a los tres o cuatro meses después de la siembra.
Fresón
El fresón es un cultivo ideal para cualquier estación del año y precisa un suelo blando y bien abonado. El riego, por otro lado, tiene que ser espaciado y más regular cuando empiece a florecer el fruto para favorecer su engorde.
Los fresones se recolectan desde finales de la primavera hasta el otoño.
Judías
Las judías pueden plantarse en el mes de marzo si la temperatura es suficientemente cálida.
Las semillas pueden plantarse directamente en un suelo rico en fósforo y potasio. Este debe de conservar la humedad sin encharcarse por lo que el riego debe de ser frecuente.
Las judías tardan entre ocho y diez días en germinar dependiendo de la variedad. Pueden recolectarse cada ocho/diez días.
Lechugas
Las lechugas también pueden cultivarse durante todo el año. Necesitan un suelo suelto y fértil y un riego frecuente, evitando mojar la parte central.
Pueden recolectarse en unos 30/40 días.
Perejil
El perejil también cuenta con la ventaja de poderse cultivar durante todo el año aunque es recomendable protegerlo del frío. Necesita un suelo rico y bien labrado y apenas necesita ser regado.
Puede recolectarse a los dos meses y medio, hoja a hoja o recolectando la planta entera.
Pepino
El pepino puede sembrarse en marzo si las temperaturas son cálidas, superiores a los 15º. Necesitan un suelo rico en nutrientes por lo que es recomendable abonar cada dos semanas. La tierra también debe de estar húmeda sin llegar a encharcar.
Los frutos pueden recogerse a las diez semanas, cuando miden entre diez y veinte centímetros.
Puerros
Los puerros se cultivan en invierno, primavera y verano. Necesitan un suelo bien abonado y con una buena humedad cuando suben las temperaturas. El riego ha de ser moderado pero frecuente.
Se recolectan a partir de los cuatro meses posteriores a la siembra.
Remolacha
La remolacha se adapta a prácticamente cualquier circunstancia y terreno. Necesita un riego frecuente para conservar la humedad.
Puede recolectarse en tres/cuatro meses después de la siembra.
Zanahorias
Las zanahorias necesitan un suelo rico en potasio y un riego suave y frecuente que permita conservar la humedad.
Germinan en una ventana de entre 5 y 25 días y se recolectan en tres o cuatro meses.
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